En ocasiones puede que nos encontremos en una situación en el hogar, en el trabajo o en el grupo de amigos que pueda colocarnos en un status de inseguridad o bien de incertidumbre, sea cual sea el motivo y la realidad del momento.
Debiendo entablarse en ese momento la calma, por parte de alguien del grupo que debe retomar las riendas y proyectar todos los miembros no solo hacia la serenidad sino también hacia la consecución del objetivo.
Evidentemente sabrás que te estamos hablando de asumir las riendas del liderazgo, pero cuando llega ese momento de alta tensión, puede que sea difícil optar por tomar la delantera o dejar que alguien más lo haga, o lo que es peor dejar que la circunstancia fluya por si sola y asumir la consecuencia.
Es aquí donde te preguntarás ¿es el liderazgo una necesidad para que la sociedad fluya? O bien ¿el liderazgo es cuestión de actitud, y de determinación en cada individuo? Pues, bien amigo, una respuesta lleva a la otra. Lee con atención estas líneas de reflexión.
Liderazgo, más que cuestión de pensar es acción.
En efecto, todos podemos pensar en cierto momento y ante determinado hecho asumir las decisiones idóneas, y proceder a ejecutarlas y más cuando se trata de un grupo, puede que nos sintamos movidos a hacerlo bien sea porque nos creemos capaces o porque queremos asumir tal rol.
Es por ello, que puedes considerar que la actitud de liderazgo deba ser adecuada a las situaciones que sobrevengan, pero la verdad es que las mismas obedecen y se corresponden con una postura que la persona adopta hacia la vida.
Es decir, el liderazgo surge en ti, cuando decides hacer frente a las adversidades o bien cuando optas por inmiscuirte en asuntos para los que aún no estás preparado, debiendo en todo caso tener el temple para proseguir, es así como no solo forjas un carácter fuerte sino que además funges de ejemplo y guía para demás personas.
Esta modalidad de personalidades, son necesarias para el progreso social, de aquí que la misma condición de líder pueda surgir de forma innata en un individuo o bien sea las circunstancias quienes lo vayan moldeando.
Es ante todo esto que una persona puede considerar, ¿Cómo se yo que requiero actuar con liderazgo?, pues bien basta que reconozcas:
- La situación está tensa o bien no se ven los objetivos claros y tú tienes la solución o ves un camino claro, pues es momento de que tomes la decisión y decidas tomar las riendas.
- Sientes un ímpetu de dirección, de guiar, es momento de que brotes de ti tus cualidades de liderazgo y las pongas en práctica.
- Tiendes a ser una persona en el que la gente cree, y por ende influyes en la conducta de los mismos, es por ello, que si tienes la convicción de que tus acciones van a girar en torno del bien del grupo y en especial de la obtención de metas, no dudes en actuar.